
El presente informe recoge los principales resultados de la encuesta anual sobre actitudes, creencias y percepciones de la población vasca ante la inmigración. El objetivo fundamental de este sondeo no es otro que aumentar el conocimiento sobre las actitudes hacia el fenómeno de la inmigración en la CAE y medir el clima de convivencia, aportando esta información al conjunto de la sociedad vasca y, en última instancia, ayudar a las entidades e instituciones cuyo cometido es la gestión para conocer de manera más exhaustiva este fenómeno social*.
*Para más información sobre el marco conceptual, consultar el anexo “Marco conceptual”.
Informe completo
Resumen de resultados
Conclusiones
- La sociedad vasca tiene problemas importantes, fundamentalmente de índole económica o relacionadas con la vivienda, y entre ellos no está la cuestión migratoria: nunca ha sido percibida como un problema y tampoco lo es ahora, en 2024.
- El nivel de apertura que tiene la población vasca hacia las personas de origen extranjero ha vuelto a previos a la crisis sanitaria de 2020, una vez estabilizada la demanda de asilo de personas ucranianas. El valor de 63,54 puntos expresa esa vuelta a posiciones más lógicas.
- Las mayores preocupaciones de la sociedad vasca siguen girando en torno a las amenazas hacia nuestro estado de bienestar, que se hacen patentes en los prejuicios o “rumores” dominantes. Aun con todo ello, la sociedad vasca rechaza un sistema de protección social únicamente para las personas autóctonas. Considera que tanto la educación pública como la sanidad son derechos universales para todas las personas.
- Observamos una tendencia positiva en relación con la presencia de estereotipos falsos y negativos hacia la inmigración de origen extranjero. La mayoría de la ciudadanía los rechaza, incluso en el caso de los prejuicios más extendidos, como que estas se benefician del sistema de protección social o que aumenta el machismo.
- En cuanto al grado de simpatía, las personas procedentes del la UE Occidental y Argentina destacan por tener puntuación más alta. Por otro lado, el menor grado de simpatía se muestra hacia personas de origen magrebí, que, aunque no a gran distancia, tiene la puntuación más baja.
- La sociedad vasca es cada vez más consciente de que la cuestión migratoria es un proceso social estructural dentro de una dinámica más global. Los datos parecen indicar que está interiorizando que todas las personas que residimos en la CAE, de una manera u otra, podemos aportar a nuestro bienestar y que avanzar en el establecimiento de los mecanismos que permitan la participación real de todas las personas en el marco de nuestro estado de derecho, que es el que establece nuestros derechos y obligaciones.
Índice de tolerancia

Los resultados obtenidos en el Índice de Tolerancia a lo largo de estos años han estado muy sujetos y muy relacionados con las dinámicas macroeconómicas, de forma que a períodos de expansión económica han correspondido puntuaciones más altas y a fases de crisis se han asociado pérdidas de confianza y menor tolerancia hacia las personas de origen extranjero. Esta asociación se produce en sociedades que se encuentran en fases tempranas de inmigración y de diversidad cultural, como es el caso vasco.
Sin embargo, en los últimos años, se han producido dos situaciones excepcionales en nuestro entorno que han influido o están influyendo en las posiciones de la sociedad vasca hacia las personas de origen extranjero: nos referimos a la crisis de la COVID-19 y a las consecuencias de la invasión de Ucrania. Ahora parece que superada la crisis sanitaria provocada por el COVID-19 y una vez que se ha cronificado el conflicto y ya no hay una situación de emergencia social por la llegada de personas solicitantes de asilo desde Ucrania, la sociedad vasca vuelve a posiciones previas, con una puntuación entre los 60,67 puntos de 2019 y los 65,00 puntos de 2020. Esta variación puede estar influenciada por las elecciones europeas y los debates preelectorales en Estados Unidos , que han puesto la inmigración en el foco de atención.